12 de agosto de 2014

EL CONTRATO DE LAS MADRES

Pichu se fue ayer a las 19:00, y a los diez minutos ya la echaba de menos.
Sí, soy así de ñoña. Rectifico, SOY ASÍ DE MADRE.
Confieso, en realidad, este post lleva tiempo pidiendo salir, movido por todas las quejas madrehijiles que inundan últimamente las redes, y si no lo ha hecho antes ha sido porque mis ratos libres ahora en vacaciones, sorprendentemente, son menos. Estos meses estoy más de "madre" aún si cabe, y mi súper rato libre ocurrió hace unos cuantos fines de semana, cuando se casó un gran amigo en Los Madriles. Después de eso, volvemos a la intensidad de la maternidad.
Soy MADRE, en primera y última instancia, y sí, soy persona. Es que creo que ambos conceptos se mezclan y se confunden. Quiero decir que una cosa no excluye la otra, y, por tanto, SI SOY MADRE, ES PORQUE PRIMERO SOY PERSONA.
Cuando nos convertimos en madres, firmamos un contrato de por vida que implica, entre otras cosas, renunciar a la comodidad en general y al "yo" en primera persona, pero también implica recibir amor en cantidades inimaginables.
Éste es el contrato con el que vino Pichu bajo el brazo (no era un pan, no), y que volvió a traer su hermano hace casi dos años:

Como veis, en él nuestro papel no es el de protagonista, ni el de actriz revelación, somos secundarias, eso sí, secundarias de categoría, porque sin nosotras el  guión de la maternidad no tendría sentido. La verdad es que, si revisas las cláusulas del contrato sin saber que lo que estás firmando es la maravilla de la maternidad, creo que da hasta miedo. Es como una renuncia a todo tu ser y tu  esencia; y sin embargo, no es así, porque LA MATERNIDAD TE REDESCUBRE DE OTRA MANERA. Pero hay que saber mirar y apreciar, y no quedarse sólo en la cubierta.
Como ya he dicho, SOY PERSONA. Soy Leonor de nacimiento, Noni desde mi primer segundo de vida, mujer, maestra, amiga y amante de los míos y de la vida, me gusta disfrutar de la belleza de lo simple que nos rodea, en mis ratos propios, cuando nadie me ve, adoro el silencio, la calma y la soledad buscada, y sin embargo: ME ENCANTA SER MADRE, que es todo lo contrario a mucho de lo último que acabo de suscribir. Mis dos tesoros son lo mejor que puede haberme dado esta vida. Muero por sus besos, sus sonrisas y sus bellas caritas durmiendo. Me enamoran a cada segundo y, sí, también me agotan a partes iguales. Ésa es la esencia de la maternidad: es como el enamoramiento primero o como el definitivo, te tiene en vilo a toda hora, agota mentalmente y, en consecuencia, físicamente, y sin embargo, engancha y conquista, pasando a ser imprescindible en tu vida.
Así que, como imaginaréis, ESTOY ENAMORADA DE MI MATERNIDAD, lo que no quiere decir que no necesite mi silencio de antaño, mi soledad buscada, mis ratos de "yo, mí, me conmigo". Claro que necesito todo eso, y a veces incluso más. Porque yo también me canso, porque se me agota la paciencia y se va de la mano de la energía a tomar unas cañas, dejándome ambas sola y seca. Porque soy humana y no tengo súper poderes. Peeeero... esto no quiere decir que de mis 24 horas como madre los 365 días al año, me pase 23 horas de cada uno de esos días gritándole al mundo lo cansinos que son mis hijos. No señores, porque no lo son, sólo son niños, como ustedes y yo lo fuimos hace un tiempo, ¿recuerdan? Y tienen las mismas necesidades e inquietudes que todos nosotros: jugar, correr, saltar, bailar, cantar, tocar, hablar, hablar, hablar, preguntar, caerse, mancharse, tirar cosas, sacarnos de quicio...en definitiva, VIVIR por ellos mismos mil y una experiencias y aprender de qué va esto de la vida, esa misma que ellos no han pedido y que, sin embargo, se les ha otorgado porque un buen día, sus papis/mamis, esos que ahora tantísimo se quejan, desearon que tuvieran con tanta fuerza.
Como digo, yo también me canso y estallo, y me quejo, y me enfado, y lloro... Vamos, SOY PERSONA, y como tal, expreso mis emociones, cambio de estado de ánimo y siento la necesidad de compartirlo con mis iguales, pero me sigo reconociendo MADRE, con todas y cada una de las letras de la palabra. Es por eso que entiendo poco tanta frase poco graciosa hablando mal a toda hora de la maternidad, de la pesadez de los hijos, de lo bien que se está sin ellos, de descuidos gordos que rozan la irresponsabilidad. Soy consciente de que está muy de moda reivindicar la imperfección de las madres, cosa que defiendo y comparto, porque, efectivamente, no somos perfectas, ya por el simple hecho de que somos humanas. Estoy de acuerdo con los mensajes en tono de humor que hablan de esta imperfección, siempre entendida desde mi modo de ver como NATURALIDAD, sin más. Pero señoras, señores, cuando acuden a la queja permanente en forma de "reniegue" de sus propios retoños, cuando pasan el día conectados a las redes lanzando frases llenas de amargura por ser madres/padres y de arduos deseos constantes de tenerlos lejitos o lamentos por no haberlos dejado más tiempo allá, y presumen sin parar por ver quién lo hace peor que quién... Es cuando yo me pregunto: ¿PARA QUÉ HAN TENIDO HIJOS ENTONCES? ¿Por tradición familiar? ¿Por seguir la estirpe? ¿Por jugar a las muñecas y vestirlos en plan cuqui? ¿Porque se les pasaba el arroz? ¿Por aburrimiento? ¿Por sentirse integrados con sus amigos? ¿Por volver a celebrar los reyes magos? No sé, alguna razón tendrán, porque PARA VIVIRLOS Y QUERERLOS no lo parece. O eso o lanzan mensajes erróneos a la sociedad y así es como lo entendemos el resto. Como diría mi padre: lo poco gusta, lo mucho cansa, y lo demasiado cabrea.
Todo es más sencillo, hasta la maternidad y la paternidad, en serio. Todo tiene sus pros y contras (¿verdad, Ara?), sus más y sus menos, sus momentos dulces y sus momentos amargos. Sí, la maternidad también. Y todos ellos, nos guste o no, son vivencias necesarias para madurar, para crecer como familia (si es que esto es lo que queremos, vamos, si no, siempre podemos dedicarnos a los números circenses) y para volverse a enamorar de la vida, a veces, y otras, querer abofetearla.
Yo soy persona, repito, y por eso ahora mismo mi corazón se divide entre echar mucho de menos a Pichu, que está con sus tíos y primos no acordándose nada de mí (ironías de la maternidad), y escaparme sola un rato, huyendo de este horrible calor y del monopolio adquirido de Rubiazo, que anda estos días peor que un novio celoso venga a repetir el éxito del verano: "mamiiiiiiiiiiiiii".
Pero como digo, todo en su justa medida señores, los extremos y las estridencias no son ni estilosas ni de buen gusto, y además, pasan de moda. Así que, seamos un poquito más consecuentes con lo que elegimos y deseamos, que la vida son dos días, y entre parir y criar se nos ha ido uno enterito. Si dedicamos el otro a renegar de los nuestros y a no disfrutar de lo que tenemos delante... Llegaremos tarde cuando vuelen alto. Y entonces, las quejas, los rechazos y las ganas de independencia serán las suyas, y nos partirán el corazón en mil pedazos.
 
CON M DE MAMÁ y C de CONTRATO MATERNAL

20 comentarios:

  1. Noni, ¡qué gran entrada! Me pasa como a ti: vivo enamorada de mis hijos. No sé quién desea más las vacaciones, si ellos o yo. Me encanta hacer cosas con ellos y disfrutar de su día a día, que dentro de un tiempo exharé de menos. Esto no quita para que también me guste pasar un poco de tiempo a solas, para poner a encontrarme conmigo misma y poder oír mis propios pensamientos. Todo el mundo necesita poder descansar de lo que está haciendo, por mucho que esto le guste, de vez en cuando.
    Yo firmo, firmé y firmaría ese contrato otra vez. No dudo de que quien no se cansa nunca de repetir lo cansinos que son sus hijos y pide más tiempo lejos de ellos les quiera, pero como bien dices, no se nota y ofrece una imagen de lo que yo creo que es la maternidad.
    Por cierto, gracias por la alusión y perdona este mini post que acabo de colarte, jejeje
    ¡Besotes!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Necesitaba que saliera ese post porque hace tiempo q mi TL solo esta lleno de mensajes seminegativos, quejas... Me da pereza tuiter solo por eso! Yo ya lo digo, soy defensora de nuestros continuos fallos y necesidad de soledad! Yo los necesito también para no enloquecer o fugarme a Hawaii! Pero de ahi a que haya competicion por ver quien se cansa mas... Pues no se... O eso o se estan lanzando mensajes desvirtuados. Se que poca gente compartirá mi sentir, pq va en contra de lo q parece q se lleva ahora, pero nunca he sido esclava de las modas. Y no voy a serlo ahora. Los extremos no son buenos. Ni la super perfeccion fingida ni los despropositos que leo. Terminos medios. (Faltan todos los acentos del mundo, pero finalmente, estoy contestando desde el tlf...) Un besazo enorme y gracias por entender.

      Eliminar
  2. Noni tienes toda la razón yo lo veo ahora que estoy con suegros y descansando pero si ella quiere jugar con la abuela y yo aprovecho para leer posta o ponerme al día en mis redes sociales como que me siento culpable,me falta algo,y ahora que voy a estar dos semanas sin ella la voy s echar muchiiisimo de menos y no sabré que hacer :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es normal echarlos de menos, y ¡sanísimo también! Ahí radica la clave, en el término medio, ni tanto ni tan calvo. Nosotras también necesitamos nuestro espacio para luego apreciar más aún el regalazo que son :)
      Un beso!!

      Eliminar
  3. Ay, Noni, es que yo soy madre, fundamentalmente madre. Como digo en Y de Yo, mi pareja y yo decidimos traerle al mundo y a él le debo mi versión mejor. Claro que me agoto, claro que me gustaría tener más tiempo para hacer otras cosas, pero el tiempo con Ojazos es el mejor aprovechado del mundo, no lo cambio por nada y siempre me falta.
    Dicho esto, me fenomenal la desdramatización e incluso necesaria. Pero el límite, como me dijo alguien a quien ambas conocemos y apreciamos, está en el respeto al menor. Por ahí no paso. Seguro que cada una tenemos la manga con una anchura distinta, pero hay algunas cosas que rechinan sólo con posar los ojos sobre ellas. Algún día alguien bromeará con dejarse al niño olvidado en el coche y habrá a quien le parezca gracioso.
    Como bien dices en tu entrada, hay padres que no parecen querer serlo. Tú planteas varias teorías, yo estoy segura de que hay muchos que lo son porque toca, lo veo en mi entorno a diario. Una pena por esos niños... Pero también por esos padres.
    Una gran entrada. Un besote fuerte.
    Pd.: me preguntaba de dónde venía Noni... No puedes imaginarte cuánto me gusta tu nombre. Otra conexión más.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Perdón que me meta... y más a estas horas. Querida Let.. de dónde pensabas que venía Noni? La curiosidad me mata!!!!! Jajajajaa.
      Besos a ambas, solAZos!!!

      Eliminar
    2. No tenía ni idea ;)

      Eliminar
    3. Me hace especial ilusión que tú precisamente me hayas entendido así sin más, sin necesidad de hablarlo o de releer. Sé que hay quien se ha sentido atacada directamente con el post, y sin embargo, como has visto, sólo hablo de eso, de las cosas que rechinan porque de tan extremas parecen irreales (espero que lo sean, vamos). Una cosa es el humor y otra las bromas de mal gusto. Creo que ninguna de las aquí presentes hemos dudado de que, efectivamente, para poder estar en plena forma como "madres" primero hemos de estarlo como personitas que somos.
      Mil gracias Let por tu comentario :)
      I love la conexión ;)

      Eliminar
  4. Esto... perdooooona???
    Tres días de desconexión y compruebo con estupor que te has metido en mi cabeza???
    Jajajajaja!
    Ahora en serio. Chapeau!!
    De cabo a rabo
    Una vez más.
    Contigo, al quinto pino and everywhere!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jajajajja!!!
      Let's go the to the 5th pine!!! Que falta nos hace! jajajaj!
      Gracias princesa por entender, siempre.
      Loviu muchísimo!!!!

      Eliminar
  5. ¡Hola!
    Me ha gustado muchísimo tu post. La verdad es que es un tema que me indigna bastante y que además me enfrenta con conocidas y amigas que piensan todo lo contrario a mí.
    De hecho me ocurrió el pasado año cuando compartí en mi facebook personal un video de Informativos Telecinco donde varias madres hacían declaraciones sobre la vuelta al cole de sus hijos diciendo que están cansadas, que ahora empezaban las vacaciones para ellas, que se ha hecho el verano interminable...
    Yo sinceramente no siento nada de empatía hacia quienes piensan así.
    Y creo que, como tú bien aludes en tu pregunta, muchas parejas tienen hijos porque es lo que toca, es lo que tienen que hacer, lo normal. Pero no porque lo deseen con locura, no porque sea el mayor sueño de sus vidas...
    Enhorabuena por tu gran post y por ser la voz de tantas mamis que estamos cansadas de esas absurdas quejas. Un fuerte beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mil gracias por comentar ;) Si lo que está claro es que la cuestión está en el punto medio. Yo necesito mi espacio de vez en cuando, dándomelo y permitiéndomelo les enseño a ellos también a tenerlo, estoy más receptiva y algo menos agotada que no cogiéndolo. Ahora, de ahí a "vender" que sólo quiero mi espacio y demás va un largo trecho. Creo que hay temas que no son motivo de broma, respeto que quien los considere así continúe haciéndolo, pero yo necesitaba desmarcarme de esos caso extremos que, a mi modo de ver, nada tienen que ver con el humor.
      Un abrazo

      Eliminar
  6. Ups, había escrito un comentario pero .... no sé dónde se fue :/

    Te decía que me ha gustado mucho tu entrada, creo que es un gran post, pues pones voz a muchas de nosotras. Es cierto que el tema cansa bastante y que cabrea casi siempre. Así que mi más sentida enhorabuena por tus letras.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Marta, gracias por comentar ;)
      Como he dicho en otras respuestas, yo es que de verdad creo que la historia está en el término medio, ni somos perfectas y menos las 24 horas al día, ni me creo que nos pasemos el día deseando tenerlos lejos y demás. Hay momentos para todo, para ser madres y para serlo pero sin niños, dedicándonos un huequito a nosotras. :)
      Un abrazo

      Eliminar
  7. Yo veo que hay dos corrientes...la del humor por ser madres imperfectas y la de las que parece que viven amargadas por ser madres, por ser mujeres y por ser incluso.
    Yo me uni a un grupo pensando que era una cosa y esta mañana salí de él entre harta, llena de vergüenza ajena y enfadada de que esa gente no se de cuenta de lo importante que es la etapa infantil en la vida de una persona.
    Lo malo es que no se ciñe a las redes sociales, si no que es una tendencia que se extrapola a la vida real...niños a los que se riñe por todo, a gritos, constantemente. A veces es más difícil ver a unos padres besar y abrazar a sus hijos que gritarles, que digo a veces...casi siempre.
    Muy triste si.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estoy contigo, Vanesa, una cosa es el humor sano y otra la queja enfermiza y de competición. Efectivamente, la infancia es tremendamente importante, y yo no quiero desperdiciar parte de ella alzando mi voz en contra de todo lo que vivo como madre. Desahogarse con gracia está bien. Hay otras cosas que, a mi modo de ver, se pasan de castaño oscuro.
      Un abrazo

      Eliminar
  8. Noni bonita! Una vez más lo has bordado!
    Ser mami es el trabajo mas bonito y agotador del mundo! Pero yo no cambio este título por nada!
    Justo hoy he publicado un post contando que Martín es un bebé de alta demanda y es harto agotador el atenderle pero ojalá pudiera hacerlo siempre y no volver a trabajar fuera de casa.
    Martín es un niño muy muy deseado y aunque consuma mi batería todos los días NUNCA me cansaré de estar con él.
    Y por cierto yo también tenía la curiosidad de saber de dónde venía Noni, penaaba que tendrías un nombre impronunciable rollo Rigoberta, Hermenegilda o vaya usted a saber cual y resulta que tienes un nombre PRECIOSO! De futura reina ;)
    Tienes que hacer un post del por qué de Noni.
    besos guapa :*

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Carol preciosa, antes que nada... Necesito conocer y achuchar a tu gordo! quedemos prontito!
      Gracias por tu comentario y por entender que no estoy posicionándome en ningún extremo, sólo opinando y decantándome por el carril del centro.
      Un abrazo enorme y besotes!! Hermenegilda o Rigoberta? Ya te valeeeeeeee! (que no digo yo que no tengan su encanto, pero...)

      Eliminar
  9. Ya lo hemos hablado en persona... Completamente de acuerdo. Una cosa es desahogarnos y tomarlo con humor y otra... Bueno, eso que hemos estado comentando.
    Gran post que pone voz a muchas de nosotras..

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias preciosa. Sabes que para mí fue un alivio hablar un rato y ver que, efectivamente, no me estoy volviendo agria con la edad, sino que es cierto que hay cosas que claman al cielo.
      Un besazo súper enooooorme. Te quiero un montón!!

      Eliminar

Estaré encantada de que opines, te expreses, me cuentes cosas y, en definitiva, de que nos comuniquemos ;) ¿Te animas a hacerlo?